La renovada Plaza de San Gregorio de Guareña luce ya una nueva iluminación ornamental, tras el acto de inauguración que tuvo lugar este martes, en la que también comenzó a funcionar el Hotel Rural ‘Turuñuelo’, situado en ese mismo enclave.
En dicho acto organizado desde el ayuntamiento, intervino el edil de obras, Juan Carlos Fernández Serrano, que ofreció a las personas asistentes algunos detalles, tanto de las obras que han tenido lugar durante los últimos meses, como del tipo de iluminación que se ha usado en ella, focos tecnología LED, que harán que se reduzca el gasto energético y ayudará a potenciar el valor arquitectónico, histórico y turístico de los edificios de la zona.
El encargado de apretar el botón de la nueva iluminación fue Juan Pedro García Rebollo, hermano mayor de la Cofradía del Cristo del Silencio, con motivo de la conmemoración del 75º aniversario de su fundación, que se subió a las escaleras que dan acceso al Mercado de Abastos con las personas que trabajan día a día en ella.
García Rebollo comenzó su intervención dando las gracias al ayuntamiento por «haber confiado en la cofradía para inaugurar las reformas y la nueva iluminación de la plaza, cuyo nombre, da el titular de la iglesia que preside San Gregorio», dijo.
«Esta plaza nos vio nacer y esta plaza nos sigue ayudando a crecer de la mano de los vecinos de Guareña. Un espacio que, a lo largo de los años ha sufrido varias transformaciones. La conocimos de tierra, en la que los más pequeños hacían los “guas” para jugar con los bolindres. También albergó, durante un tiempo, los puestos del mercado municipal, mientras se reformaba. La vivimos con columpios, tobogán y demás atracciones que hacían las delicias de niñas y niños. Así mismo, la hemos conocido también con un seto central y un enrejado rodeando la estatua de don Juan Durán y dos frondosos árboles que ya desparecieron hace tiempo y que nos venían estupendamente como refugio cuando la mañana del Jueves Santo apretaba el calor mientras montábamos nuestros pasos en el mismo centro de la plaza. Después vino la fuente que hoy conocemos, hasta llegar al momento actual, en el que estrenamos una nueva iluminación que vendrá a resaltar los edificios que conforman ésta nuestra plazoleta del Santo y por supuesto el templo, que desde hace 75 años, acoge a las sagradas imágenes de nuestros titulares», prosiguió su discurso.
Además de realizar un breve repaso por estos 75 años, el hermano mayor de dicha cofradía, deseo en nombre de la misma, que, «estas reformas y la nueva iluminación contribuyan a realzar aún más una zona que desde siempre ha sido espacio de convivencia, juegos, paseos, celebraciones y también, por supuesto, de abastecimiento… teniendo como referente y titular a quien durante años fue co-patrono de Guareña, San Gregorio, en cuyo honor aún seguimos celebrando la feria de Mayo y que antes de la llegada de San Isidro, hace algo más 50 años, era quien bendecía nuestros campos».
«Que San Gregorio, junto a las sagradas imágenes del Cristo de Medinaceli, el Stmo. Cristo del Silencio y María Santísima de la Amargura nos bendigan a todos, nos permitan conocer el centenario de nuestra cofradía y muchos años más, disfrutando y cuidando ésta plaza, pero que atesora y conserva las esencias y tradiciones de una Guareña universal», terminó su intervención.
